La seguridad vial es un factor esencial en lo que respecta a nuestra integridad física, económica e incluso psicológica. A pesar de las muchas normas de tráfico que existen, el riesgo de sufrir un accidente está siempre encima de la mesa. Por esta razón, lo más conveniente es estudiar en detalle cuáles son los profesionales que se van a encargar de garantizar que, si esto sucede, tengamos una indemnización que mitigue las consecuencias. Un sector en el que los peritos de coches tienen mucho que decir, habiendo de acudir en todos los casos a los mejor valorados en la actualidad.
Qué es un perito de coches
Antes de entrar de lleno en el tema, es importante definir en qué consiste exactamente ser perito de coches. Estos profesionales, al igual que el resto de los peritos, se encargan de analizar un suceso en aras de obtener toda la información relativa al acontecimiento. En este sentido, estamos ante un experto generalmente en ingeniería que es capaz de determinar con absoluta precisión cómo ha sido el evento de un accidente o, si fuera el caso, de valorar el estado de un vehículo.
Para ello, los peritos de coches deben contemplar todos los elementos que entran en juego. Es decir, no solo han de contar con la información técnica del coche y sus respectivos aspectos mecánicos o eléctricos, sino que también están obligados a considerar las palabras de quienes han participado en el suceso, bien sean los protagonistas o todos los que estaban a modo de testigos. De hecho, los peritos también llevan a cabo un estudio pormenorizado del lugar de los acontecimientos, recogiendo huellas y demás pruebas que les permitan elaborar un informe con absoluta precisión.
A diferencia de otras especialidades en el peritaje, en este caso no hay un título oficial que habilite al profesional para ejercer esta clase de funciones. No obstante, deben acreditar su experiencia en el sector de la automoción y, por ende, no es extraño que suelan ser ingenieros. Unos especialistas que se dirigen a todo tipo de clientes, tanto aquellos que han sido partícipes en un accidente de tráfico como a empresas destinadas a la compraventa de vehículos, fruto de su rol como tasadores de vehículos. Con esto en mente, te animamos a que estudies en detalle cuáles son las principales funciones que pueden realizar en cada caso.
Evidencias que saca a la luz un perito de coches
Si una persona sufre algún tipo de accidente en la carretera por culpa de un tercero y este se niega a abonar la indemnización correspondiente, entonces se abre un procedimiento en el cual se deben recoger todas las pruebas del suceso. Hablamos de un trabajo conocido como reconstrucción de accidentes, donde el perito elaborará su propio informe que, llegado el caso, tendrá validez judicial. Motivo por el cual es crucial saber en manos de quién ponerse, buscando siempre a aquellos especialistas que han demostrado estar a la altura de las expectativas.
En este punto merece la pena señalar que un buen perito contempla el daño del vehículo y el del afectado. De este modo, cuando se interpone una reclamación al causante del incidente, recibimos una indemnización que compense la situación de forma integral. En consecuencia, no solo hablamos de un trabajo asociado a nuestro bienestar físico, cubriendo toda la asistencia sanitaria que podamos necesitar. Sino que también guarda relación con nuestra integridad económica, tanto en lo que respecta a la reparación del vehículo como a las posibles consecuencias laborales que hayamos podido sufrir en el proceso.
Volviendo al marco de la tasación, si tenemos pensado poner en venta nuestro vehículo, con un perito sabremos que la valoración obtenida es completamente objetiva. Un recurso esencial para anticiparse a posibles estafas y así garantizar que recibimos un pago justo por el coste total del coche. Un ejemplo más de cómo estos profesionales van a repercutir de manera directa en nuestro estado financiero.