En el universo del cuidado de la piel, es frecuente encontrar una amplia cantidad de marcas y productos que buscan superarse. Con frecuencia, es un gran desafío elegir las opciones más indicadas para cada mujer ante la abrumadora cantidad de información que circula en torno al cuidado de la piel del rostro. Por eso, en este artículo, te contaremos sobre la importancia de elegir una rutina de skincare adecuada a tu necesidad. Aquí van algunas recomendaciones para que tomes nota.
Actualmente, es usual abrir Instagram o Tik Tok y ver cómo diferentes artistas, o personas reconocidas en redes sociales, muestran su rutina de skincare o cuentan los beneficios de un determinado producto para el rostro. Es muy fácil distraerse con ese tipo de contenido y creer que todos los productos son beneficiosos para todas las mujeres.
El skincare se ha vuelto notablemente popular y motivos sobran para incluir cada día esta rutina de cuidado facial. Limpiar, hidratar y proteger son tres palabras clave a la hora de pensar en el concepto de skincare. Estos pasos, permiten establecer un orden en la rutina de cuidado del rostro y son fundamentales a la hora de conseguir resultados positivos.
Recomendaciones para tu rutina de skincare
¿Quieres planificar tu rutina de cuidado facial pero no sabes por dónde empezar? ¿observaste algunas manchas en ciertos sectores del rostro? ¿las líneas de expresión dicen presente? ¡Es hora de planificar una adecuada rutina de skincare!
Si necesitas comprar productos de skincare para mujer y no sabes qué aspectos tener en cuenta para realizar una compra acertada, sigue leyendo las recomendaciones que te facilitamos a continuación:
- Conoce tu tipo de piel
Para cuidar adecuadamente tu rostro, el paso inicial consiste en saber cuál es tu tipo de piel ya que existen distintos tipos y, en base a ésto, diversas maneras de proteger tu cutis.
Te preguntas ¿cómo se clasifica cada tipo de piel? Existen 5 tipos de piel: normal, grasa, mixta, sensible y seca. Si bien cada una tiene diversas características, que pueden ayudar a determinar en qué categoría te encuentras, puedes consultar con un médico especialista que te dará un diagnóstico y dirá qué productos son los indicados.
En este sentido, es importante no elegir cualquier producto ya que la piel afronta cambios constantemente ya sea por la edad, cambios hormonales como también debido a problemas de salud.
- Escoge productos que sean tus aliados
Si ya conoces tu tipo de piel, el siguiente paso consiste en escoger productos acordes a tu necesidad. Actualmente, existen variedad de marcas que ofrecen cremas elaboradas con ingredientes de origen natural y de alta calidad.
En este sentido, marcas como Jess Beauty skincare se destacan por ofrecer productos para todo tipo de piel, con fórmulas sin parabenos, libres de crueldad animal y de tipo veganos. Estas características no son un dato menor si buscas productos amigables con el medio ambiente, que promuevan el bienestar, generen un ritual natural y establezcan una barrera protectora entre tú y el mundo exterior.
Conseguir una piel suave, tersa, saludable y que no pierde la humectación natural, es posible seleccionando los productos acordes y siguiendo con constancia el paso a paso de tu rutina de skincare.
¿Qué productos son un rotundo sí? El agua micelar, para el paso inicial de limpieza, luego una crema hidratante y, por último, el protector solar, que debe aplicarse todos los días.
- Lleva un estilo de vida saludable
Crear rutinas saludables, aunque eso implique realizar cambios, marca una gran diferencia en el día a día. Así como es importante dedicar tiempo al autocuidado de la piel, también lo es generar hábitos más saludables que se verán reflejados a nivel interior y exteriormente.
Beber suficiente agua, para estar bien hidratada, y alimentarse de manera más saludable y equilibrada, incluyendo alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras, puede ser una buena manera de incorporar cambios significativos. Dejar el cigarrillo también es un hábito que tu piel agradecerá.
A su vez, es importante realizar alguna actividad física ya que cuando practicas deporte segregas endorfinas y esto, unido a la sudoración, permite que la piel luzca más tersa, elástica y radiante, ya que se eliminan toxinas. Por otra parte, al realizar actividad física descansas mucho mejor, ya que consigues un sueño reparador y eso repercute en cómo luce tu rostro al día siguiente.
Sin embargo, cada cambio que incorpores debe realizarse con consciencia y también con constancia. Si eres una persona que le cuesta iniciar cualquier tipo de cambio, puedes empezar por hábitos pequeños, como elegir consumir una fruta en lugar de un alimento ultra procesado o añadir recordatorios en tu agenda para beber más agua. Empezar por cosas pequeñas también cuenta.