Las inversiones en infraestructuras de Gas Natural Licuado GNL han aumentado alcanzando los 42,000 millones de dólares anuales en 2024,
esto a medida que los países se esfuerzan por asegurar fuentes de energía confiables como resultado de la inestabilidad ocasionada por la invasión de Rusia a Ucrania.
Aumenta la inversión en GNL
Las inversiones totalmente nuevas en infraestructuras de gas natural licuado son 200 veces mayores que en 2020 cuando tan solo se invirtieron 2,000 millones en desarrollo de este tipo debido a la pandemia. Con todo, se estima que después del 2024 caerán considerablemente las aprobaciones de proyectos de GNL ha medido que los países se alejan del consumo de los combustibles fósiles y se aceleran las inversiones e infraestructuras energéticas bajas en carbono.
Este boom en proyectos de infraestructura de GNL está impulsado principalmente por la demanda de gas natural en Europa y Asia debido a la guerra por la invasión de Rusia a Ucrania y las subsiguientes sanciones y restricciones impuestas a las exportaciones del gas ruso. El gasto en proyectos de este tipo se mantuvo relativamente estable en 2021 con 28,000 millones de dólares aprobados y 2022 con 27,000 millones de dólares aprobados.
Aumenta la demanda de GNL
Muchos países del mundo dependen del gas natural licuado como parte de su sistema de generación de energía, a pesar de que las naciones se han comprometido a reducir la dependencia de los combustibles fósiles a fin de transitar a una combinación energética baja en carbono.
Con todo, la demanda de GNL se estima que crezca a corto plazo, pasando de consumir a nivel mundial 4 billones de metros cúbicos actualmente a 4,5 billones de metros cúbicos en 2030 lo que representaría un aumento del 12,5%.
Por parte del continente americano se estima que la demanda de gas se mantenga relativamente estable hasta finales de esta década. En contraparte la demanda regional en Asia y el Pacífico se disparará creciendo hasta en un 30% desde unos 90,0000 millones de metros cúbicos a alrededor de 1,16 toneladas de metros cúbicos para el 2030. Esto producto del crecimiento económico y las políticas a favor del gas de los gobiernos de dicha zona.
“Los gobiernos siguen siendo optimistas sobre el gas como un combustible de transición asequible para la energía de los próximos años”, sostiene el vicepresidente de análisis de Rystad Energy, Palzor Shenga. “Así lo demuestra el rápido crecimiento de las inversiones en infraestructuras de GNL” sentenció el directivo.